La acidez de las aguas costeras de la Antártida podría duplicarse para finales de siglo, poniendo en peligro ballenas, pingüinos y cientos de otras especies que habitan el Océano Austral, según una nueva investigación de la Universidad de Colorado Boulder. Este estudio, publicado el 4 de enero en la revista Nature Communications, proyecta un aumento del 100% en la acidez en los primeros 200 metros del océano para el año 2100, comparado con los niveles de la década de 1990.
El Papel Crucial de los Océanos en el Cambio Climático
Los océanos desempeñan un papel vital al absorber aproximadamente el 30% del CO2 emitido a nivel mundial. Sin embargo, a medida que más CO2 se disuelve en los océanos, el agua se vuelve más ácida. La Dra. Nicole Lovenduski, coautora del estudio y directora interina del Instituto de Investigación Ártica y Alpina de CU Boulder, destaca que las emisiones de CO2 causadas por humanos son el corazón de la acidificación oceánica.
Vulnerabilidad de la Región del Océano Austral
El Océano Austral, que rodea la Antártida, es particularmente susceptible a la acidificación debido a la tendencia del agua más fría de absorber más CO2. Además, las corrientes oceánicas en la zona contribuyen a condiciones de agua relativamente ácida. Utilizando un modelo computacional, el equipo de investigación simuló cómo cambiaría el agua del Océano Austral en el siglo XXI, revelando un aumento significativo en la acidez para 2100 si no se reducen las emisiones.
Impacto en Áreas Marinas Protegidas
El estudio examinó específicamente las condiciones en las Áreas Marinas Protegidas (AMP) de la Antártida, donde las actividades humanas, como la pesca, están restringidas para proteger la biodiversidad. Aunque existen actualmente dos AMP en el Océano Austral, que cubren alrededor del 12% de la región, se han propuesto tres más en los últimos años para abarcar aproximadamente el 60% del Océano Antártico.
Pronóstico para las AMP
El modelo del equipo demostró que tanto las AMP adoptadas como las propuestas experimentarían una acidificación significativa para finales de siglo. En el escenario de emisiones más alto, donde el mundo no hace esfuerzos para reducir las emisiones, la acidez promedio del agua en la región del Mar de Ross, la MPA más grande del mundo en la punta norte de la Antártida, aumentaría en un 104% respecto a los niveles de la década de 1990 para 2100.
Impactos Ecológicos y Urgencia de Acción
Estudios anteriores indican que la acidificación del agua afecta negativamente a organismos clave en la cadena alimentaria marina, como el fitoplancton, y debilita las conchas de organismos como caracoles marinos y erizos de mar. Estos cambios podrían perturbar la cadena alimentaria, afectando eventualmente a los principales depredadores como ballenas y pingüinos.
El Rol Potencial del Mar de Weddell
El Mar de Weddell, una de las tres AMP propuestas cerca de la Península Antártica, se considera un refugio climático para organismos debido a su extensa cobertura de hielo marino. Sin embargo, el modelo sugiere que, a medida que el planeta se calienta, el deshielo del hielo marino provocará una acidificación similar a otras AMP, aunque con una progresión ligeramente más tardía.
Conclusiones y Llamado a la Acción
El estudio subraya que solo bajo el escenario de emisiones más bajo, donde la sociedad reduce rápidamente y de manera agresiva las emisiones de CO2, se evitaría la severa acidificación del Océano Austral. Concluye con una advertencia clara: "Todavía tenemos tiempo para elegir nuestro camino de emisiones, pero no mucho". En un momento crucial para la salud del ecosistema marino, la acción decisiva para reducir las emisiones se presenta como la única vía para preservar la biodiversidad y la estabilidad del Océano Austral.
*Nota: Este artículo busca proporcionar información valiosa y detallada sobre la acidificación del Océano Austral, destacando la importancia de tomar medidas para mitigar sus impactos.